ARTURO DEL CASTILLO. 5

Un episodio de Randall, the killer, que comienza como relato ilustrado y se va convirtiendo en historieta. Con los dibujos de Arturo del Castillo y escrito por Hèctor Oesterheld.

Completa. Y resulta una joyita, entre folletìn e historieta.

ARTURO DEL CASTILLO. 4

Evoluciòn de un estilo eclèctico.

La pluma de Arturo del Castillo adquiere una identidad propia, a travès de su familiaridad con la obra de grandes historietistas. Comienza a vislumbrarse la evoluciòn hacia Randall, the killer.
Cuatro pàginas de una novela continuada semanalmente para Intervalo, de editorial Columba:

Se establece el Del Castillo màs conocido, el de los westerns; y empieza con un enorme èxito en Hora Cero semanal. Aparecen las tramas rìgidas entremezcladas con sus trazos fluidos.

Randall, the killer. (1958, Hora Cero semanal):

Garrett, el Montaraz. (1961, Misterix):

Las tramas rìgidas van adquiriendo mayor presencia en el dibujo.

Loco Sexton. (Skorpio):

Seminola. (Skorpio, 1985):

Comienzan a desaparecer las tramas de lìneas y aparece un salpicado o punteado manual; la lìnea se sintetiza y las viñetas son màs simplificadas. Se mantiene un excelente dominio de la luz y sombra.

El Tarzàn de HOGARTH.

Leìamos sus aventuras en Pif Paf, El Tony, Fantasìa; veìamos sus pelìculas (con Gordon Scott, Ron Ely); lo escuchàbamos por radio (con Cèsar Llanos) y en la propaganda de Toddy, que auspiciaba el programa radial, aparecìa la imagen recreada por Burne Hogarth.

En la foto, Burne Hogarth en la Primera Bienal Mundial
de la Historieta, en Buenos Aires, en octubre de 1968.

La imagen gràfica indeleble de Tarzàn es la que le dio Burne Hogarth. Su figura, con aquella anatomìa marcada fibra por fibra, quedò como ìndice de un prototipo .

Hay en el dibujo de Hogarth una fuerza, una dinàmica y una energìa exclusivas de su visiòn artìstica.

La construcciòn de las viñetas del Tarzàn de Burne Hogarth, segùn apareciò en el libro El dibujo a travès del temperamento de 150 famosos artistas, de Enrique Lypszic, 1953.

La historieta de Tarzàn tuvo otros grandes dibujantes, anteriormente a Hogarth la dibujò el magistral Harold Foster; tambièn Bob Lubbers realizò posteriormente tanto la pàgina dominical como las tiras diarias, siguiendo la lìnea de Foster con gran calidad.

BRUNO PREMIANI. 4. Las novelas ilustradas.

Premiani historietizò en Patoruzito innumerables novelas de aventuras que transcurrìan en variados lugares y èpocas.


Sin pretender hacer un listado total, podemos citar:

Las hijas de los faraones, de Emilio Salgari.
La flecha negra, de Robert L. Stevenson.



Hèctor Fieramosca, de D'Azeglio.

El tulipàn negro, de Alejandro Dumas.
Los cautivos del bosque, del capitàn Marryatt.

El guaranì, de Josè de Alencar.



El ùltimo mohicano, de James F. Cooper.



Los evadidos de Los Plomos, de Casanova.



Los dramas de la esclavitud, de Emilio Salgari.
Amadìs de Gaula.



Las dos Dianas, de Alejandro Dumas.

Guillermo Tell, de Federico Schiller.
Colmillo Blanco, de Jack London.
Historia en dos ciudades, de Charles Dickens.
Motìn a bordo, de Julio Verne.
El hombre que rìe, de Vìctor Hugo.

El hombre de fuego, de Emilio Salgari.

Cartago en llamas, de Emilio Salgari.
Los buscadores de oro, de James Curwood
Los compañeros de Jehù.
Otelo, el moro de Venecia, de W. Shakespeare.

El dominio del dibujo le permitìa a Premiani realizar una simplificaciòn de su estilo sin perder su fuerte personalidad. A su maestrìa del arte acadèmica unìa un manejo de los claroscuros que era su marca de autor.